El teletrabajo es una experiencia útil para el desarrollo profesional y personal

La crisis sanitaria aceleró la digitalización y nos está dejando muchas enseñanzas que nos resultarán de gran utilidad de cara al futuro. En este sentido, el teletrabajo resulta una experiencia nueva de gran valor.

El 96% de las organizaciones en América Latina implementó el teletrabajo, una experiencia nueva que predominó durante buena parte de 2020. El 40% alcanzó incluso a tener al 80% de su estructura trabajando de forma remota.

Ante este profundo cambio impuesto por necesidad, gran parte de los trabajadores se encontraron por primera vez desempeñándose desde sus casas, haciendo teletrabajo una experiencia que muchos vivieron inicialmente con entusiasmo, aunque no tardaron en comprobar que el ámbito hogareño presenta también sus desafíos a la hora de desarrollar con eficiencia las tareas laborales.

<< Lee también «Mundo laboral: cambios y desafíos» >>

Esta situación puso en evidencia algunas de las carencias de los actuales programas educativos y de formación profesional. No profundizan más allá de los saberes específicos de cada disciplina, no abordan aspectos comunes a todas las personas. Estos resultan, a lo largo de nuestra vida, de vital importancia para permitir el desarrollo laboral y personal.

Saberes útiles

El autoconocimiento, la comunicación asertiva y el liderazgo personal son saberes que hubiesen resultados sumamente útiles para afrontar de la mejor manera el distanciamiento social. Esto aplica tanto en lo relacionado con el desempeño laboral como con el bienestar personal.

Los humanos somos seres sociales. Si bien las herramientas tecnológicas y el acceso a Internet, nos permiten seguir conectados, seguramente sentimos el malestar que nos provoca la imposibilidad de abordar la comunicación de aquellos temas que “preferimos hablar en persona”. Necesitamos todo nuestro espectro comunicativo para transmitir ideas y conceptos a nuestro interlocutor. También, nuestra expresión corporal, las miradas, los gestos y la conexión irremplazable que posibilita la proximidad física.

Preferencias

Si pudieran elegir, el 56% de los trabajadores preferiría hacer home office sólo algunos días de la semana. Mientras que sólo un 25% optaría por trabajar siempre desde su casa, según relevó la consultora Adecco.

Desde luego que se deben valorar los beneficios del trabajo remoto, que van más allá de la necesidad puntual actual relacionada con la problemática sanitaria, como lo son el menor impacto ambiental que se logra minimizando el uso de transportes, el ahorro de tiempo de viaje y, en muchos casos, una mayor productividad por menores distracciones.

<< Lee también «Habilidades que importan ante el avance tecnológico» >>

Pero no debemos olvidar que lo más importante de las organizaciones son sus equipos de trabajo. En la inmensa mayoría de los casos, aquellos que pudieron continuar operando con éxito de forma remota, ya estaban conformados y funcionando previamente al aislamiento. Habían encontrado su dinámica y alineamiento con anterioridad, de forma presencial. Para estos equipos, el distanciamiento representó un desafío que, como grupos ya establecidos, pudieron superar con éxito.

La sociedad, los tiempos y los negocios están cambiando a ritmos sin precedentes. La crisis sanitaria de 2020 aceleró la digitalización y nos está dejando muchas enseñanzas que nos resultarán de gran utilidad de cara al futuro.

«El autoconocimiento, la gestión de emociones, la comunicación asertiva y el liderazgo personal son saberes que hubiesen resultados sumamente útiles para afrontar de la mejor manera el distanciamiento social, tanto en lo relacionado con el desempeño laboral como con el bienestar personal»

Está ahora en nosotros la posibilidad de seguir evolucionando como trabajadores y como personas. Valorando más que nunca aquello que nos es propio como seres humanos. Esto es la posibilidad de relacionarnos personalmente, y sumando las nuevas herramientas que nos ofrece la innovación tecnológica. Lo importante, sin embargo, no cambia, que es nuestro compromiso auténtico con nosotros mismos y nuestras responsabilidades. Todo en pos de construir una sociedad mejor y con más posibilidades para todos.

* Javier Carrizo, autor del libro “Significación laboral” y fundador de Movant Connection.

Artículo publicado originalmente el 27/01/2021 en Perfil.